Adiós a las 40 horas: ya hay fecha para la propuesta de la jornada laboral a 37,5 horas
Existen preocupaciones sobre la productividad y la competitividad de las empresas
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La reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales sigue generando debate en España, especialmente entre la patronal y el Ministerio de Trabajo, encabezado por Yolanda Díaz. La reunión entre sindicatos, patronal y el Gobierno tendrá lugar el próximo 24 de septiembre, y en ella se discutirán no sólo la disminución de horas trabajadas, sino también el derecho a la desconexión digital y la mejora del registro horario, cuestiones que se consideran cruciales para la reforma laboral.
En una reciente mesa de diálogo social, el Ministerio propuso un plan de apoyo a las pequeñas y medianas empresas para facilitar la implementación de esta reducción, ofreciendo bonificaciones para contratos indefinidos. Esta iniciativa busca que el cambio beneficie a las pymes, que representan el 90% del tejido empresarial en España. En paralelo, los sindicatos han celebrado una asamblea en Madrid, enfocándose en la reducción de horas trabajadas, con el objetivo de presionar a las organizaciones empresariales como CEOE y Cepyme para lograr su apoyo en esta propuesta. La situación continúa evolucionando, con la expectativa de un nuevo documento del Ministerio que aún no se ha enviado a los empresarios.
Reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales
La propuesta de reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales ha generado un intenso debate en la actual legislatura en España. Impulsada por el Ministerio de Trabajo, esta iniciativa busca establecer un nuevo marco de trabajo que beneficie a más de 12 millones de empleados que cumplen con la jornada estándar de 40 horas. Actualmente, un 17% de los contratos ya adoptan esta reducción.
El acuerdo entre PSOE y Sumar contempla una implementación gradual. En 2024, se espera que la jornada se reduzca a 38,5 horas, antes de alcanzar las 37,5 horas en 2025. Sin embargo, no hay una fecha fija para su entrada en vigor, lo que depende del progreso de las negociaciones con los diferentes agentes sociales. Aunque se desea que la aprobación sea rápida, es posible que se retrase hasta 2025 debido a la necesidad de alcanzar un consenso entre todas las partes involucradas.
A pesar de las intenciones del Gobierno, la oposición y la situación económica plantean desafíos significativos. Las preocupaciones sobre la productividad y la competitividad de las empresas también juegan un papel importante en este debate. Sin embargo, el Ministerio de Trabajo sigue adelante con la propuesta, reconociendo su potencial para mejorar la conciliación laboral y fomentar la creación de empleo.
En un contexto más amplio, la idea de reducir la jornada laboral no es exclusiva de España; otros países europeos, como Francia y Alemania, han implementado medidas similares con resultados positivos. Estas experiencias sugieren que una menor carga horaria puede coexistir con un aumento en la productividad y la satisfacción de los trabajadores. La pandemia del COVID-19 también ha subrayado la necesidad de repensar los modelos de trabajo, haciendo de la reducción de jornada una respuesta adecuada a los nuevos desafíos laborales.
El impacto de la reducción de horas se sentirá en gran medida en el sector público y en muchas empresas privadas, aunque no todos los sectores experimentarán cambios significativos. Las pequeñas y medianas empresas enfrentarán desafíos adicionales para adaptarse, mientras que sectores con alta demanda de horas laborales, como la hostelería o la construcción, podrían necesitar reestructuraciones para cumplir con la nueva normativa.
Trabajadores a tiempo parcial
El Ministerio de Trabajo ha indicado que los trabajadores a tiempo parcial tendrán derecho a mantener su carga horaria actual, aunque recibirán un aumento proporcional en su salario. Esto significa que las empresas no podrán reducir las horas de trabajo aplicando el porcentaje de parcialidad vigente antes de la reducción de la jornada a 37,5 horas semanales. Además, se contempla un plus económico que garantizará que sus salarios no se vean afectados, dado que los empleados a tiempo completo trabajarán menos horas manteniendo su sueldo.
Sin embargo, si un trabajador desea reestablecer el mismo porcentaje de parcialidad que tenía antes, el borrador de la norma también permite esta solicitud. Aun así, se especifica que, en términos generales, la empresa deberá evaluar dicha petición. Si decide rechazarla, deberá comunicarlo por escrito al empleado, explicando de manera motivada los motivos de la denegación.
Registro horario
Por otro lado, a nueva normativa impone un control horario digital en las empresas, prohibiendo métodos manuales. Las sanciones por incumplimiento variarán de 1.000 a 10.000 euros por trabajador.
Entrada en vigor
La nueva jornada laboral beneficiará a más de doce millones de trabajadores en España, reduciendo su carga anual de 1.950 a 1.800 horas. Aunque no habrá reducción de sueldo, el valor de las horas trabajadas aumentará, con 18 horas como equivalente al 50% de la jornada, sin afectar al SMI. Aquellos a tiempo parcial podrían ver incrementado su salario o ajustar su jornada, manteniendo sus ingresos actuales. Aunque el objetivo es que esta medida se implemente progresivamente, todavía no se ha fijado una fecha concreta para su entrada en vigor, pero se espera que se apruebe en las próximas semanas.